Diócesis del El
Yunque celebra su
4ta. Jornada Diocesana Juvenil,
“Con Cristo siempre,
alegres”
Jóvenes se lanzan a caminar por los barrios y urbanizaciones de Luquillo. |
El pasado domingo, 1 de abril de 2012, se llevo a cabo la 4ta Jornada
Diocesana Juvenil en los terrenos de la Parroquia María Madre Del Redentor en
el Bo. Pitahaya de Luquillo.
Acompañados del Obispo de la Diócesis del El Yunque, S.E.R. Mons.
Eusebio Ramos Morales junto al Vicario de la Pastoral Juvenil, el Rvdo. P. Ramón
Villamor quienes dieron la bienvenida a los 600 jóvenes en representación de cada
una de las misiones diocesana.
Luego de meses de preparación en talleres, retiros y vivencias llego
el día esperado, era notable ver en sus rostros, el entusiasmo y la alegría de
los jóvenes que se dieron cita para este encuentro.
A pesar del intenso sol, eran animados por los jóvenes Verónica Acevedo,
Luriel Laboy Parrilla y Jessica Castro Emmanuelli, quienes invitaban a cantar, alabar y realizar dinámicass
expresando el gozo que sentían, pues todos unánimemente gritaban; “Con Cristo
siempre estamos alegres”.
También se podía escuchar a cada instante el lema diocesano: “Al
encuentro con Cristo que nos llama,
forma, renueva y envía”, respondiendo todos; somos jóvenes,
discípulos-misioneros.
Monseñor Eusebio Ramos Morales, quien llegó de luego de haber
compartido con la comunidad del pueblo de Culebra, para la celebrar el Domingo de Ramos en la Parroquia
Ntra. Sra. Del Carmen junto al Pueblo Santo de Dios en procesión por las calles
del pueblo.
A su llegada los jóvenes lo recibieron llenos de jubilo, expresándoles
su agradecimiento, como lo hicieron los jóvenes de la pastoral juvenil de la
Parroquia La Resurrección de San Isidro, Canóvanas, portando una pancarta que leía; “Jóvenes unidos por Cristo, encaminados
a la verdad llegaremos a la Santidad”.
Obra realizada por la Pastoral Juvenil de la Parr. San José |
“Hoy celebraron la Pasión del Señor en Culebra y puedo decirles a
ustedes mis queridos jóvenes, que hay un pueblo que esta despertando en la fe,
que clama a Jesús como el centro de su vida. Ustedes jóvenes
tienen un reto y es tomar el baton de la dimensión de la iglesia, es salir y manifestar en nuestras
calles, siendo testigos de Jesús.
Jóvenes hoy el Señor les a lanzado un reto y es ser gestores un Puerto
Rico nuevo, y para esto hay que trabajar, hay que construir con pasión y
alegría siendo discípulos-misioneros de Jesús”, dijo Monseñor.
Al comenzar la caminata que los llevaría rumbo a la Parroquia San
José, recorriendo distintas comunidades, barrios, urbanizaciones y sectores,
pregonando palabra de vida eterna, oraciones, y mensajes que leían en las
pancartas invitando a rescatar nuestros valores cristianos, otros expresaban;
“Oremos por un País en el que reine el amor y la paz”.
Durante el recorrido se presentaron diversas estaciones que mostraban
la realidad del joven de hoy, sumergida en la violencia y la falta de una
conciencia coherente al Evangelio de Vida, a pesar de las tantas dificultades
sociales el Señor sigue llamando, formando, renovando y enviando.
El obispo en una de las parada aprovecho la oportunidad para meditar y
a los jóvenes compartiendo su experiencia durante su viaje que esté realizó a
Cuba para la conmemoración de los cuatrocientos (400) años de la Aparición de
la Virgen del Cobre y la visita de su Santidad el Papa Benedicto XVI.
“Allí Jóvenes cubanos a pesar de las dificultades políticas, pedían
que Cristo Jesús fuera su señor para siempre, pero necesitan evangelizadores
hombre y mujeres de fe. Esto que
estamos haciendo aquí, nos tiene
que preparar para asumir la misión de jóvenes dispuesto a evangelizar su
presencia viva y transformadora.
Por eso nuestro pueblo necesita de jóvenes cristianos que asuman sus proyectos
de vida, proyecto de familia, proyectos vocacionales, laicos comprometidos para
cambiar los destinos de este país”, puntualizó.
Al llegar a la Plaza Publica de Luquillo, fueron recibidos entre
aplausos y la animación musical del Ministerio Conciencia y por una obra
realizada por la pastoral juvenil de la Parroquia San José.
Al concluir la actividad Monseñor Eusebio les agradeció a los jóvenes diciéndoles,
hoy la Iglesia se instituyen la calle,
que evangeliza y anuncia que Cristo es el Señor de la Vida, iglesia que
inyecta la fe y la esperanza a los pueblos, porque somos discípulos-misioneros,
porque nuestra vida es misión.
Para Roger Carrasco, quien es Coordinador de la Comisión Diocesana de
la Pastoral Juvenil, expresó su agradecimiento a los organizadores de la Misión Fajardo quienes se esforzaron
para que la actividad fuera todo un éxito.
“Siempre estuve confiado en el trabajo que el equipo realizó y el
apoyo de sus asesores. El
propósito era simple, hay que salir a las calles, anunciar e integrar a todos
los jóvenes de la diócesis en una gran familia y hoy somos testigo de
esto”.
Además para este joven le fue impresionante como el Obispo observaba en
todo momento con asombro por el entusiasmo, la energía y la actitud activa de
la juventud. Añadió que ha servido
para alentar a otros jóvenes a que no tengan miedo de seguir a Cristo, a que se
integren en los esfuerzo de trabajar en conjunto para seguir levantando la
juventud en todas las parroquias de la diócesis y animarlos a que participen de la Jornada Mundial Juvenil
en Brasil.
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