NUEVA ETAPA EN EL CAMINAR MISIONERO DE LA DIÓCESIS DE EL YUNQUE

NUEVA ETAPA 

EN EL CAMINAR MISIONERO DE LA DIÓCESIS DE EL YUNQUE

 

Por S.E.R.Mons. Eusebio Ramos Morales, Obispo

“Paz a los hermanos, y caridad con fe de parte de Dios Padre y del Señor  Jesucristo”, (Ef. 6,23).

1.    ¡Qué la Vida Nueva de Jesucristo, acogida e impulsada en la convocatoria de la  Nueva Evangelización, llegue a todos  los hijos de Dios, y  miembros  de su Pueblo amado!  Con  esperanza me dirijo  a ustedes, llamados a ser discípulos de Jesucristo en esta Iglesia Local,  para invitarles a vivir esta nueva etapa  diocesana con verdadero espíritu misionero  y gran alegría por la fe que profesamos a  Nuestro Señor de la Vida Nueva. Él nos está hablando  a través de  los signos de los tiempos,  y  a la misma vez, nos ha  convocando  durante este Año de la Fe a la Nueva Evangelización. 

2.     Durante los  pasados cinco años,  “remando mar adentro” y caminando de la mano de Santiago Apóstol, se nos ha señalado un camino de fe y de  esperanza para alimentar la vida de nuestro Pueblo. Con dolor constatamos  que la cultura de la muerte  pretende imponerse de diferentes formas, entre,  las que podemos mencionar,  el individualismo, la dispersión,  la violencia, fanatismos,  ideologías y esclavitudes modernas. Es por esto, que abrazamos una nueva etapa en este caminar misionero para reestructurarnos, fortalecernos en nuestras debilidades, y así, confirmar y asumir nuestro discipulado, con mayor pasión y alegría, para transformar la cultura  de la muerte en cultura  discipular misionera para la vida.

3.    La dimensión misionera la hemos fortalecido creando la Vicaría de Misiones y el proyecto  de las Comunidades Misioneras. Se trata de impulsar este espíritu misionero en los corazones y en las relaciones humanas, generando actitudes de comunión, solidaridad,  servicio y respeto por la vida  de cada ser humano. De aquí, la necesidad de renovar y de fortalecer a nuestras comunidades parroquiales,  para que,  se conviertan en escuelas de oración, de comunión y de solidaridad. Para esta renovación y fortalecimiento, la Escuela  Diocesana de Formación La Barca, sigue siendo un instrumento privilegiado en este caminar misionero.  Por esto, les invitamos a todos a  participar y aprovechar este espacio para el encuentro con Jesús y con los hermanos.

4.    Dos proyectos que ayudarán en esta formación  y acción misionera serán la construcción de nuestro Obispado de la Diócesis de El Yunque y la ampliación de la Casa de Retiros Camino de la Cruz, en Humacao. Oficialmente, puedo decirles que se inicia la construcción de nuestro Obispado el 2 de diciembre de 2013. Recientemente, hemos firmado las escrituras de la donación del terreno, gracias a la generosidad de la Familia Bermúdez Veve.  Igualmente, agradecemos  a todos los donantes y oferentes por el Primer Diezmo durante este año 2013, para la construcción del Obispado, que, ascendió a $56,809.26. También, con la ayuda del Equipo Timón del Quinto Aniversario, en la Actividad de los “Tarjetones”,  y la colaboración de nuestra gente en la Diócesis, logramos crear un fondo para iniciar  la ampliación de la Casa de Retiros  “Camino de la  Cruz”, en Humacao. Para el proyecto de esta Casa de Retiros, tenemos que continuar buscando otras  ayudas y fuentes de ingreso.

5.    Ahora, les exhorto nuevamente a colaborar con el Segundo Diezmo Diocesano para las Parroquias Pobres. Aunque, la fecha sugerida  para la entrega de esta segunda colaboración diocesana es el Día de Acción de Gracias, (28 de noviembre), tienen hasta el 31 de diciembre para hacer su generosa aportación.  Con estos dos primeros proyectos, ya comenzamos a establecer las estructuras que nos brindarán las facilidades propias para ofrecer nuestros servicios y la formación misionera que requiere la Diócesis de Fajardo-Humacao.

6.    Otro acontecimiento de relevancia para la Diócesis de El Yunque durante estos cinco años  fue la Ordenación de nuestra  Primera Clase Diaconal.  En total, se ordenaron 21 nuevos diáconos  que han venido a asumir y a fortalecer el proyecto misionero de esta Iglesia Local en el Este de Puerto Rico. Seguimos solicitando a nuestra gente, en todas las Comunidades  Parroquiales, la oración por la vocaciones sacerdotales y religiosas, a  través del Cáliz Vocacional.   “La mies es mucha y  los obreros pocos.  Rueguen, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies”, Lc. 10,2.  Tenemos dos seminaristas y algunos prospectos. La Oración debe ser incesante. También, en esta misma línea del Discipulado Misionero, tendremos el Retiro Anual del Clero de la Diócesis de Fajardo-Humacao, del 4 al 8 de noviembre.  Desde ya, invitamos a todos a orar por nuestros sacerdotes para que el Señor nos dé las fuerzas y nos guíe con su Espíritu  para asumir este proyecto  discipular misionero  con mayor “pasión, nuevos métodos y nuevas estrategias”. 

7.    Además, les informo que culminaremos este Año de la Fe con una gran Asamblea Diocesana de revisión, evaluación y afirmación misionera. Esta se llevará a cabo el sábado, 16 de noviembre, en la Casa de Retiros Camino de la Cruz, en Humacao.  Deberán de participar los Presbíteros,  Diáconos y Religiosos  de la Diócesis,  todos los Consejos Parroquiales de Pastoral,  y los líderes de Movimientos, Comisiones y Pastorales Diocesanas. Durante esta Asamblea, tendremos la Clausura  del Año de la Fe a nivel Diocesano.  A nivel de las Parroquias, exhortamos a los Párrocos y Administradores a clausurar el Año de la Fe en el espíritu de la afirmación misionera para la Nueva Evangelización. A nivel de Puerto Rico, tendremos la Clausura del Año de la  Fe, en conjunto con la Celebración Nacional de María, Madre de la Divina Providencia. Esta Gran Celebración Nacional  se llevará a cabo en el Coliseo Pachín Vicens de Ponce, el martes, 19 de Noviembre de 2013. Desde ya, les invitamos  a todos a participar, profesando nuestra fe cristiana con alegría  y honrando a María, Madre  de Jesús y madre nuestra.

8.    Finalmente, extiendo a todos nuestra bendición paternal con los mayores deseos de paz y vida nueva en Cristo Jesús. Nuestro caminar humano debe orientarse hacia la vida, y no hacia la muerte. Por eso, nuestro discipulado misionero nos señala la vida, y esa debe ser la tarea y el compromiso de todos los agentes de pastoral en la Diócesis de El Yunque. ¡Qué María, en su advocación de Nuestra Señora del Carmen,  y Santiago Apóstol,  que nos muestra el camino del Evangelio de la  Vida, nos acompañen e intercedan por nuestra conversión  personal y pastoral! Convertidos y renovados en el espíritu de la Nueva Evangelización, tendremos corazones  y mentes libres para amar y servir,  para sanar y reconciliar, y dar vida a nuestros  niños, jóvenes, familias y a nuestros ancianos, como verdaderos discípulos misioneros de Cristo Jesús. ¡Se ha iniciado una Nueva Etapa de Misión en la Diócesis de El Yunque, se ha iniciado  la Nueva Evangelización!